¿Y ahora que pasará?

Es una pregunta recurrente en mi cabeza, ¿Ahora qué? Quizás acostumbrado siempre a que pase algo, acostumbrado a estar siempre en alerta, hace que no me pueda relajar, siempre estoy pensando que va a pasar algo, siempre en alerta, siempre con el cerebro maquinando, como ahora mismo por ejemplo, estaba escribiendo este primer párrafo hasta que me manda un whatsapp mi pareja; “Está llamando tu Madre a la peluquería.”

Quizás para la mayoría de personas es una alegría que tu mamá llame y saber de ella, pero para mi no, es un agobio, un estrés, una vuelta a todo lo malo vivido con ella, a una mierda muy grande. Por eso, es que siempre estoy en alerta, porque estoy convencido que la vida me jode por cualquier lado, si deja de afectarme algo malo que está pasando, tranquilo, soy la vida, te jodo por otro sitio.

Y la pregunta ¿Y ahora que pasará? Es vivir en un futuro volátil y normalmente siempre destructor, porque la mente en estos casos siempre se va a escenarios catastróficos, los cuales, generan ansiedad de no saber, de no tenerlo controlado.

Sea una cosa o sea otra al final, siempre es algo, y lidiar día a día con esto, acaba las pilas a cualquiera, yo intento vivir, llevar mis días, sin meterme con nadie, estoy conmigo mismo, pero es muy muy difícil acabar el día con energía en estas situaciones, normalmente uno estando bien mental y emocionalmente puede afrontar las situaciones de una manera coherente y sin mayor dificultad, pero a mi, se me hace cuesta arriba estas cosas, me agotan la poca batería que puedo tener.

De todas formas, esta pregunta del enunciado, está bien que uno se la haga digamos que a un corto plazo de cinco años, para proyectar lo que quieres conseguir etc, pero no vivir con esa pregunta constantemente en la cabeza, porque eso, si es malo y se acaba con una ansiedad muy grande provocada por escenarios que lo mas seguro es que jamás vayan a ocurrir.

Por eso, el presente es ahora y no el qué.

Deja un comentario